viernes, 19 de febrero de 2016
domingo, 7 de febrero de 2016
Hongos en las uñas
HTTPS://WWW.FACEBOOK.COM/FARMACIA.DOCTORA.MORALES
Los hongos pueden aparecer en la uñas de las manos y de los pies,muy dificiles de tratar y faciles de contagiarse.Has notado algun cambio en el color,la forma y la textura de tus uñas?. Aprende a detectar los sintomas para aplicar estos tratamientos que te recomendamos
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Los hongos pueden aparecer en la uñas de las manos y de los pies,muy dificiles de tratar y faciles de contagiarse.Has notado algun cambio en el color,la forma y la textura de tus uñas?. Aprende a detectar los sintomas para aplicar estos tratamientos que te recomendamos
La Onicomicosis es una infección micótica de la uña causada por un tipo
de hongo en particular bajo la superficie de la uña. Puede afectar
indistintamente a las uñas de las manos y los pies, aunque lo
más frecuente (80% de los casos) es que se produzca en los pies, especialmente
en los dedos gordos.
El hongo se puede contagiar de persona a
persona por contacto directo
o a través de las alfombras, calcetines, zapatos y medias. Estos
microorganismos crecen y se propagan en ambientes húmedos y cálidos, como
duchas, gimnasios y piscinas. Además, el ambiente húmedo y oscuro de los
zapatos puede ocasionar el aumento de hongos en las uñas de los pies.
Partes de la uña
Anatómicamente la uña está constituida por
las siguientes partes:
- Matriz:
es la raíz de la uña.
- Lúnula:
es la parte de la matriz que en muchas personas se aprecia como una zona
curva pegada a la cutícula de diferente al resto de la uña.
- Placa
ungueal: es toda la parte visible de la uña y está constituida por una
serie de capas de diferentes células que forman un conglomerado.
- Lecho
ungueal: es la parte del dedo que cubre la uña.
Diagnóstico de hongos en la uñas
Las uñas sanas son lisas, rosadas y tienen
una raya blanca fina en la punta, mientras que una infección de hongos cambia
el color y la apariencia. Inicialmente, afecta a una pequeña
parte de la uña y la decolora, pudiendo ser blanca, amarillo a
marrón, verde e incluso negra.
Si se deja sin tratar, la infección puede
extenderse más profundamente en
la uña, provocando que ésta se engrose o se escame, causando dolor, malestar y,
en algunos casos, la uña puede desprenderse. Es esencial tratar una infección
de hongos de las uñas para evitar que se propague a un área más grande o a
otras uñas del pie.
Prevención
- Proteger
siempre los pies del contacto directo con el suelo en piscinas, duchas y
vestuarios, usando chancletas de piscina o chanclas.
- Mantener
los pies secos utilizando calzado transpirable y calcetines que absorban
el sudor, cambiándolos a menudo, especialmente en climas cálidos.
Tratamiento
Cuando la onicomicosis es superficial generalmente se
recurre a un tratamiento tópico, consistente en la utilización de una laca de
acción antifúngica para cubrir la totalidad de la uña. Si
ha evolucionado demasiado y afecta a otras capas de la uña o al lecho ungueal el
tratamiento se hará por vía oral, aunque puede combinarse también con el
tópico.
Es muy importante cumplir de forma rigurosa
el tratamiento y perseverar ya que es un proceso largo.
Si no se hace así, el tratamiento no será efectivo y el hongo causante de la
onicomicosis se hará resistente al medicamento utilizado.
Hay que tener mucho cuidado cuando se trata
una uña infectada para asegurarse de no infectar uñas sanas vecinas. Lavarse
siempre las manos a conciencia después de cada manipulación.
Las cremas, ungüentos o soluciones no se
difunden bien a través de la placa ungueal. Los productos
especialmente indicados para las uñas se presentan en forma de lacas con las
que se logra que el antifúngico esté en contacto con la uña durante un tiempo
más prolongado. Se aplican por toda la uña y en un margen de alrededor de 5 mm
de la piel circundante.
Los antifúngicos más utilizados vía tópica son los de
amplio espectro, es decir, con actividad frente a los hongos más habituales es
el Ciclopirox, Amorolfina y Tioconazol. Los tratamientos son de larga duración
(de 3 a 6 meses) y es muy importante no abandonar antes de la total curación,
para evitar recaídas o resistencias
Los productos más adecuados se presentan en
forma de lacas o sticks de fácil aplicación y larga permanencia en la uña.
La estrategia de tratamiento es larga y la
elección de uno u otro preparado, así como su modo de aplicación, son
importantes. También es esencial saber valorar si la evolución es correcta y
cuándo se puede considerar curado. Por ello te recomendamos que nos vengas a
ver y te asesoraremos en cómo tratar este problema y valoraremos su evolución.
El farmacéutico en otitis y sinusitis pediátricas
Resfriado
Las infecciones pediátricas de vías respiratorias superiores
están entre las consultas más frecuentes en la farmacia en algunas épocas del
año. El farmacéutico debe tener claro cuáles son los signos de alarma ante un
niño con una enfermedad aguda para así activar los mecanismos para derivarlo a
urgencias o a atención primaria en caso necesario. En este artículo hablaremos
de 2 de sus patologías: la otitis y la sinusitis.
Otitis
media aguda
La otitis
media aguda (OMA) es la infección aguda del oído medio, que está situado
inmediatamente detrás del tímpano; es una de las infecciones infantiles más
frecuentes. Entre el 80 y el 90% de los niños
presentarán al menos un episodio de otitis durante los primeros años de vida.
Es la primera causa de prescripción de antibióticos.
Etiología y
manifestaciones clínicas
Las causas
más frecuentes son las infecciones virales y bacterianas. Una secuencia muy
frecuente es la siguiente: catarro viral de vías altas, con abundante mucosidad
nasal y, al cabo de unos días, aparición de otalgia, fruto de la sobreinfección
bacteriana, que ocasiona pus y dolor al estar el tímpano a presión. En niños,
las bacterias más frecuentes son neumococo y Haemophilus influenzae. Muy
infrecuentes son otros como Staphylococcus aureus y anaerobios.
El
diagnóstico es clínico, debiéndose confirmarse con la otoscopia. La sospecha
siempre es de otalgia aguda, sobre todo de aparición nocturna, o bien la
otorrea indolora, signo de que se ha perforado el tímpano y fluye el moco/pus
procedente del oído medio a través de la perforación. Debe diferenciarse de la otitis externa, que aparece en verano asociado
a baño en piscina/mar, y en el que persiste el dolor en la zona del oído.
Motivos de
derivación
Ante una
otalgia muy intensa, a pesar de analgesia habitual, fiebre muy elevada, niño
< 2 años, sospecha de mastoiditis (complicación en la zona posterior del
oído y que se manifiesta fundamentalmente por un desplazamiento del pabellón
auricular hacia adelante), y signos de alarma de fiebre y resfriado.
Tratamiento
Los
resultados de los estudios más recientes constatan que el porcentaje de
curaciones es similar tanto si se toma un antibiótico como si no se toma,
aunque se ha demostrado que el tratamiento antibiótico mejora la clínica y
acorta discretamente la duración de los días con síntomas.
¿Qué
opciones de tratamiento existen? Hay dos alternativas:
·
Tratar sólo con antitérmicos-analgésicos (ibuprofeno, paracetamol) y observar la evolución durante los
2-3 días posteriores; en la mayoría de los casos los síntomas desaparecen
(evolución más habitual). Esta es la opción más empleada y fiable en niños >
2 años.
·
Si el estado general del niño está afectado, la otitis lleva ya
más de 3 días de evolución sin observarse ninguna mejora, el niño es < 2
años, o bien se trata de una otitis media aguda bilateral o supurada, el médico
suele prescribir un antibiótico, habitualmente
amoxicilina o amoxicilina - ácido clavulánico, 80 mg/kg/día repartido en 3
dosis, durante 5-10 días.
Sinusitis
aguda
Clínica
La sinusitis
(o rinosinusitis) es una entidad infradiagnosticada. Su diagnóstico es
eminentemente clínico, pudiendo sospecharse ante:
·
Persistencia durante más de 14 días de cualquier tipo de secreción nasal, con tos diurna que empeora
por la noche.
·
Evolución bifásica, con empeoramiento a los 3-5 días, marcado por fiebre, dolor
facial, otitis media aguda asociada y halitosis.
·
Síntomas más graves de lo habitual: fiebre alta, rinorrea
purulenta abundante, edema y dolor periorbitario.
A la
exploración puede aparecer eritema en la mucosa nasal y faríngea y rinorrea
purulenta anterior y posterior. El edema leve periorbitario con decoloración es
un síntoma muy sugestivo. En niños mayores puede haber dolor al percutir el
seno afectado. Por lo general, los ganglios cervicales no están aumentados de
tamaño.
Etiología
Las causas
más frecuentes son las infecciones virales, bacterianas y alérgicas. Las
infecciosas son las habituales, sobre todo en < 6-8 años y época invernal.
En niños, las bacterias más frecuentes son las mismas que en la OMA: neumococo
y H. influenzae. Muy infrecuentes son otros como S.
aureus y anaerobios. La rinosinusitis alérgica es más típica en época
primaveral y en niños con antecedente de atopia.
Aunque lo
habitual es considerar que es necesaria una radiografía para el diagnóstico, en
los últimos años se ha visto que no es imprescindible.
En el
diagnóstico diferencial (tabla 1), la sinusitis debe diferenciarse también de cuerpo extraño
nasal, donde además del posible antecedente suele haber una rinorrea fétida
unilateral.
Criterios de
derivación
Cuando se
sospeche infección bacteriana, haya signos de alerta, celulitis en zona
orbitaria, fiebre de más de 48-72 horas de duración a pesar de antibióticos,
intolerancia oral, sospecha de cuerpo extraño nasal.
Tratamiento
·
Antibióticos: por lo general, no se necesitan para la sinusitis aguda. La
mayoría de estas infecciones desaparecen por sí solas. Cuando está indicado, el
recomendado es la amoxicilina – ácido clavulánico oral, 80 mg/kg/día, en 3
dosis, durante 10-14 días (al menos 7 días después de la desaparición de los
síntomas); otras opciones son cefuroxima y cefpodoxima. En alérgicos a la
penicilina puede optarse por no administrar antibióticos si el cuadro es leve,
o dar macrólidos o clindamicina, aunque la tasa de fracasos es mayor.
·
Adyuvantes:
o Analgésicos/antiinflamatorios: los habituales en
pediatría, como ibuprofeno y paracetamol.
o Irrigaciones nasales con suero
fisiológico: método seguro, útil para la fluidificación de las secreciones.
Se puede hacer con una jeringuilla o con una pera de goma.
o Descongestionantes y corticoides
tópicos nasales: se emplean mucho, aunque su eficacia es controvertida, sobre
todo en < 6 años. Si se emplean, no debe ser por más de 5-7 días debido al
potencial efecto rebote.
o Mucolíticos: en general no son muy
efectivos en estos casos. Los más empleados son carbocisteína y ambroxol.
o Antihistamínicos orales: considerar su utilización
en niños alérgicos. Los que presentan más experiencia en pediatría son
dexclorfeniramina y rometazina.
·
Otros consejos:
o Beber abundantes líquidos,
preferentemente agua, para hacer más fluido el moco y mejorar el drenaje.
o No permanecer acostado
demasiadas horas al día, porque esto aumenta la congestión nasal.
o Si usa gafas, que no
aprieten.
o Evitar el humo del tabaco.
o El clima húmedo es el peor,
por lo que pueden ser útiles los deshumidificadores.
o Los cambios de presión
pueden empeorar los síntomas (p. ej., viaje en coche cambiando de altitud o en
avión).
Tabla 1. Diagnóstico diferencial entre
sinusitis, alergia y resfriado
|
|||
Signo
|
Sinusitis
|
Alergia/rinitis
|
Resfriado
|
Presión o dolor facial
|
Sí
|
A veces
|
A veces
|
Duración de la enfermedad
|
10-14 horas
|
Variable
|
< 10 días
|
Moco
|
Amarillo-verdoso
Espeso |
Claro
Acuoso |
Variable
|
Fiebre
|
A veces
|
No
|
A veces
|
Dolor de cabeza
|
A veces
|
A veces
|
A veces
|
Dolor en dientes superiores
|
A veces
|
No
|
No
|
Mal aliento
|
A veces
|
No
|
No
|
Tos
|
A veces
|
A veces
|
Sí
|
Congestión nasal
|
Sí
|
A veces
|
Sí
|
Estornudos
|
No
|
A veces
|
Sí
|
Autor: Redacción
Referencias: Adaptado de "Patología respiratoria"
correspondiente al primer apartado del Ebook "El
farmacéutico como consultor en pediatría", por el Dr.
David Moreno Pérez (Médico en el Hospital Materno-Infantil Carlos Haya de
Málaga y Profesor Asociado del Departamento de Pediatría de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Málaga) y Javier Tudela von Schmiteröl
(Farmacéutico comunitario, Máster en Atención Farmacéutica y Presidente del
Colegio de Farmacéuticos de Málaga).
lunes, 1 de febrero de 2016
cuidados piel atopica
La piel atópica o dermatitis atópica (también conocido
como eccema atópico) es una enfermedad de la piel que se presenta en la cara y
cuerpo de bebes, niños y adultos. Se caracteriza porque las personas que la tienen padecen anomalias y lesionesen su piel
La dermatitis atópica es una enfermedad crónica de la piel de tipo inflamatorio. Los síntomas más característicos que presenta son picor intenso, sequedad cutánea,enrojecimiento, exudación, descamación y puede llegar a excoriación debido al rascado.
Típicamente afecta a la cara
interna de los codos, detrás de las rodillas, piernas, brazos, cuello y cara, y
suele iniciarse ya de niño, normalmente asociado a una predisposición genética
o a antecedentes familiares de asma, rinitis y alergia
A pesar de que las personas puedan dar positivo en las
pruebas cutáneas para alergias, hemos de saber que la dermatitis atópica no
está causada por ninguna alergia.
¿Cuáles son las causas?
Aún no se ha encontrado el origen de la dermatitis
atópica, pero si se conocen factores que pueden influir en la aparición de esta
enfermedad en la piel.
- Genética. Existen vínculos entre la dermatitis
atópica y el asma. Si los padres poseen una de estas enfermedades, cabe la
posibilidad de que su hijo padezca dermatitis atópica.
- Clima y localización: Factores ambientales, como
presencia de ácaros, temperaturas extremas, tejidos sintéticos, que se
comportan como irritantes.
- Trastornos inmunológicos
- Edad de la madre: A mayor edad de la madre en el momento
de dar a luz, el riesgo de desarrollar piel atópica es mayor.
Además de estas posibles causas, existen factores que son
desencadenantes de la piel atópica, como alegias alimentarias, polvo, tabaco,
el insomnio, el estrés, piel reseca, cambios bruscos de temperatura o el sudor
entre otros factores.
¿Y los síntomas?
Estos
factores pueden desencadenar que la manifestación de la dermatitis atópica sea
en forma de brote,y
entonces los pacientes sufren de fuertes picores e inflamación, que en casos severos
puede provocar eccemas y heridas a causa del rascado. Éstas pueden
infectarse, empeorando así el cuadro.
La
función barrera de la piel queda destruida, y el sistema inmunitario empieza a
reaccionar exageradamente ante cualquier estímulo. Por ello los pacientes con
dermatitis atópica pueden desarrollar a la larga otras alergias, como rinitis
alérgica o asma.
Es
una enfermedad que suele aparecer antes de los 5 años de edad, donde tiene una
prevalencia del 20%. Suele ir mejorando con la edad. Hasta un 5% de la
población adulta padece dermatitis atópica.
Puede
presentarse tanto en bebés como en adolescentes, niños o adultos. En el caso de
presentarse en bebés suele desaparecer a los 3 o 4 años de edad, aunque puede
volver a manifestarse, y suele comenzar en las mejillas.
Como decíamos
Uno de los principales síntomas es purito
intenso y prolongado, hinchazón y erupciones cutáneas.
En las personas adultas la
erupción afecta al cuello,
zona del pecho, pliegues de los codos, pantorrillas, manos y pies y cuero
cabelludo.
Los que
sufren de piel atópica suelen verse afectados por otros problemas derivados de
esta como es la falta de sueño, el estrés, nerviosismo, etc.
Todo
esto ocurre debido a que la piel atópica carece de factores hidratantes que la
piel posee de forma natural. Esto lleva a una barrera cutánea débil y a que las
capas inferiores de la piel sean propensas a sufrir infecciones.
Es la pescadilla que se muerde
la cola ya que, al ser una piel seca, esta pica. Entonces el afectado se rasca
y al hacerlo alteran la barrera de la piel causando infecciones por agentes del
medio. Las bacterias provocan irritación por lo que continua el picor. Esto es
conocido como el "ciclo de la piel
atópica".
.
Tratamientos dermatológicos
Los brotes severos de piel atópica requieren
un cuidado más intensivo siendo necesaria la aplicación de hidratantes
diariamente en la piel. Existen cremas hidratantes con hidrocortisona que son
efectivas en caso de un brote agudo.
Los corticoides presentan una rápida accion para la reducción de la
inflamación y alivio del picor,
pero su uso prolongado puede tener efectos adversos sobre la piel, reduciendo
su grosor, lo que puede provocar brotes intensos de dermatitis atópica.
La
elección del corticoide depende del tipo de piel, lesión, y zona en la que ha
aparecido el brote. Por esto es necesario consultar a un dermatólogo antes de
comenzar cualquier tratamiento.
En algunos casos, los antihistamínicos
orales, con propiedades calmantes, junto con
el tratamiento tópico, pueden ser de gran utilidad si hay sobreinfección.
Cuidado diario personal para la dermatítis
atópica
Y,
¿qué puedes hacer para mejorar una dermatitis atópica?
Básicamente,
También hay que identificar qué factores nos agravan el cuadro, y poner medidas
preventivas, como:
1- mantener las uñas cortas para no lesionar la
piel rascando
2-uso de cremas
solares con filtros físicos.
3-Evitar el sudor controlando la temperatura y la humedad ambiental. (t emperatura y humedad de la habitación constante)
El frío y la humedad del invierno son dos de
los potenciadores de la piel atópica o dermatitis atópica.
4- Usar ropas blandas al contacto con la piel, de manera que no la dañen. La
ropa con texturas rugosas, la lana, el nylon y los tejidos que nos transpiran
no son recomendables(aumentan la temperatura corporal y el picor).
Lavar las ropas nuevas para evitar contacto con tintes.
Por
lo que respecta a tu tratamiento no farmacológico:
- Higiene: Baños templados, y mejor
con productos específicos como el Gel Dermograso de Leti AT4, o syndets como Atoderm
de Bioderma. El secado debe ser suave, sin rascar.
- Hidratación:mantener la piel
hidratada, para intentar mantener el manto hidrolipídico de la piel
intacto, con el objetivo de disminuir los brotes, aliviar los síntomas
cuando éstos se presenten y evitar el ciclo vicioso picor-rascado.
- En
las fases interbrote, un paciente con dermatitis atópica debe cuidar en
extremo su piel, que puede aparecer normal, o estar un poco seca,
enrojecida o escamosa. El uso de productos específicos para la dermatitis
atópica te ayudará a prevenir nuevos brotes o espaciarlos.
- En la fase aguda de brotes hay que
utilizar productos en crema, que proporcionen un alivio intensivo de la
piel seca, con picor y enrojecida. Nuestros favoritos, Atoderm
Intensive de
Bioderma, y la crema corporal de Leti
AT4..
- En la fase aguda de brotes que cursen con
elevado picor tienes la opción de utilizar cremas cosméticas específicas
para el tratamiento de brotes de atopia, como la Atopicontrol Crema Forte, con una eficacia similar
al uso de algunos cortocoides en el control del picor, irritación y
enrojecimiento de la piel, pero sin los efectos secundarios de éstos.
Destacar también el Spray
Calmante Atopicontrol, que es el único spray calmante del picor
de efecto inmediato con efecto hidratante combinado. Ideal para llevar
siempre encima y es apto para adultos y niños.
Este cuidado
personal es de vital importancia ya que No existe una cura definitiva
para la piel atópica, de hecho, cualquier tratamiento está
dirigido a reducir la agresividad de las erupciones, aliviar al paciente y
mejorar su calidad de vida.
Lo
más importante ante casos de piel atópica es mantenerla hidratada con
hidratantes que deben aplicarse cada día, sin excepción e independientemente de
los síntomas. Las cremas
faciales, aceites de ducha, cremas corporales, etc
mantienen la piel hidratada y por lo tanto, flexible. Por esto, es menos
susceptible de sufrir picores y lesiones.
Este
cuidado diario en casa puede reducir considerablemente el uso de medicamentos,
como antihistamínicos y corticoides, que es el tratamiento indicado para casos
severos
- Exponer la piel al
agua durante el menor tiempo posible. Es preferible un baño corto y
freco que largo y caliente.
- Tomar duchas en
lugar de baños.
- Los geles de
baños han de ser suaves.
- No secar ni frotar la piel con
mucha fuerza ni de manera prolongada.
- Aplicar las cremas
humectantes cuando la piel aún está mojada. Esto ayudará a una mejor
hidratación.
- - Usar muy
frecuentemente aceites de baño o ducha que regeneren y
protejan la piel.
- Evitar esponjas
duras y cepillos de ducha.
- Usar guantes
de algodón durante la noche pare evitar rascarse durante el sueño.
Cuidando a tu piel ,
hidratándola intensamente y poniendo una atención especial en la alimentación,
como el aporte extra de Omega-3 y Omega-6 encargados de
mantener la elasticidad y humedad de la piel, conseguiremos que la piel resista
mejor los brotes y los sufra con menos frecuencia
Disponemos de productos para el aporte extra de Omega 3 y Omega 6 Porque en farmacia Morales miramos por tu salud y tu bienestar.
http://www.farmaceuticonline.com/
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