Los fármacos para niños en formato líquido deberían dosificarse en unidades métricas para evitar sobredosis, comunes al administararlos con cucharitas de café o con cucharas soperas. Esta es la opinión de Ian Paul, pediatra del Hospital Infantil Milton S.Hershey, en Pensilvania, quien ha diseñado un protocolo de dosificación métrica para la Academia Americana de Pediatría.
El protocolo quiere eliminar errores en la administración de fármacos pediátricos y evitar sobredosis al utilizar cucharas domésticas para la medicación
"Pese a que es de sobra conocido que las unidades métricas son más seguras y precisas, demasiados profesionales de la salud prescriben aún basándose en dosificaciones establecidas en tantas cucharas o cucharillas. Además, algunos padres utilizan las cucharas que tienen a mano para ello, lo que puede llevar a errores peligrosos", según Paul.
De hecho, utilizar una cuchara sopera en vez de una de café puede triplicar la dosis. Así, para evitar equivocaciones con las cucharas domésticas, el protocolo sugire que se continúen ingiriendo de forma oral pero dosificadas con mililitros. Además, se sugiere que se elimien los ceros finales y se utilicen por ejemplo 0,5 ml en vez de 0,50 para evitar confusiones.
La Academia Americana de Pediatría lleva desde los años 70 tratando de mejorar la dosificación en los fármacos pediátricos y este protocolo está diseñado para ser adoptado por fabricantes, minoristas, farmacéuticos, sanitarios y cuidadores. Por ello, Paul recomienda que se elimine en los prospectos toda información relativa a la dosificación que no esté en únidad métrica, y que los fármacos se dispensen con jeringuillas o con pequeños recipientes, ambos con marcas para las dosis.
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